Carta a la militancia
Querido compañero, querida compañera,
Durante estas semanas de campaña hemos tenido la oportunidad de conocernos, hemos hablado de partido y de socialismo en la mayoría de agrupaciones de la comarca. Ése era mi primer objetivo, conocernos mejor, hablar más y escuchar vuestras propuestas para construir una comarca cohesionada y fuerte. Gracias por abrirme las puertas de vuestras casas para escuchar mi proyecto y generar complicidades.
Ahora volvemos a votar y necesito de nuevo pediros ayuda, ayuda para formar un equipo de militantes de base con los que devolver al PSPV de l’Horta Sud la fortaleza necesaria para hacer lo que mejor se nos da: estar al lado de nuestros vecinos y vecinas, estableciendo alianzas, para transformar la sociedad.
Comencé en este partido siendo muy joven, de la mano de unas juventudes socialistas que hoy encuentro demasiado debilitadas. Mi agrupación era esa casa del pueblo donde escuchar, aprender y sentir la fuerza de una militancia, de la que yo formaba parte, para mejorar mi ciudad.
Por supuesto encontraba cosas a mejorar y cambiar dentro de nuestra organización, donde las decisiones no eran consensuadas con las bases. Por eso estoy aquí. Siempre he creído en una democracia real, me ilusioné como tantos en nuestro 39º Congreso Federal y decidí que yo quería contribuir en esa revolución de la militancia, en nuestro territorio.
Empezamos esta candidatura sin cargos ni hipotecas, con el apoyo de una militancia de base que ha ido sumando militantes allá donde ha ido. Está siendo un camino ilusionante y enriquecedor.
Con vuestra ayuda, hemos llegado a este momento histórico, la primera vez que se vota por una Secretaría General a doble vuelta. Gracias a la valentía de la militancia, hemos cambiado los procesos y ahora la decisión no se tomará en una mesa, se decidirá en las urnas. Está en vuestras manos, y eso quiere decir, que ya hemos ganado.
Mi pacto es contigo.
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